«Leave the gun. Take the cannoli
Estas son las palabras que Peter Clemenza le ordena a Roco justo después de ajusticiar a Poli en una escena impecable acompañada por esa banda sonora que con cuatro notas somos capaces de reconocer. En realidad esta frase no está en la novela, el fallecido actor Richard Salvatore la improvisó sobre el guión. Lamentablemente en la versión española quedó traducido como: «tira eso, trae los cannelloni» ¡Oops!, pero, ¿cómo que cannelloni? ya verás cómo se pone su mujer cuando abra la caja de cartón y vea que le ha traído pasta en vez del postre que le había encargado.
Seguimos con la escena, merece la pena
«Primero echas un poco de aceite, de buena calidad. Luego fríes un ajo y después echas bastante tomate y lo rehogas todo procurando que no se agarre. Echas luego tus salchichas y tus albóndigas, eh, y añades vino y un poco de azúcar, es mi truco
No me extraña que muriera de un ataque al corazón mientras cuenta anécdotas cocinando para sus compañeros del hampa, o quizá sea más cierto que tuviera ciertas diferencias con Francis Ford Coppola relacionadas con el guión.
El retorno del cannoli
Los cannoli reaparecen en otra escena del Padrino en la tercera entrega y esta vez como arma. Connie Corleone utiliza un cannoli envenenado para asesinar al padrino Don Antobello en la opera Cavalleria Rusticana y contempla cómo llega la dulce muerte con unos binoculares desde otro palco, mientras susurra:
«Descansa padrino
Nosotros no utilizaremos arsénico por compasión en nuestra receta, no iremos más allá de la delicada ricotta, y moriremos de placer tan sólo de forma ideal, no tenemos genes de mafiosos.
Coppola y la naranja asesina
Hago un matiz a mi anterior afirmación, no una rectificación: «Las naranjas» esa pequeña fruta que siempre que aparece en un plano es una seria premonición de traición y muerte. Aunque el mismo Coppola lo haya negado.
Los cannoli de los soprano SIN «SPOILER»
¿Qué es el cannoli?
- Ingredientes del cannoli alla siciliana (6 PERSONAS)
- 150 g de harina
- 15 g de cacao puro
- 15 g de café molido
- 5 g de sal
- 25 g de mantequilla
- 1 huevo de tamaño medio
- 0,5 l de vino de Marsala (sustituirlo por Oporto)
- 250 de aceite de oliva para freír
- 250 g de ricotta (sustituir por requesón)
- 150 g de azúcar
- 1 rama de vainilla
- canela en polvo para espolvorear
- azúcar glas para espolvorear
Elaboración del cannoli a la siciliana
Prepara la harina en forma cónica, como el Etna, en el cráter coloca el cacao, el café, 15 g de azúcar, la sal la mantequilla, la clara de huevo y el vino. Mézclalo todo y amasa hasta obtener una amalgama consistente.
Protégela con un paño de cocina y deja que duerma una hora, como la siesta, si es más, ya sabrás si es bueno o malo para tu cuerpo, yo con una «horeja» descanso suficiente.
El grosor adecuado es de 0,5 cm y la deberemos cortar en círculos con la ayuda de un molde de unos 10 cm de diámetros.
Ahora toca enrollarlos sobre los cilindros metálicos de los que hemos hablado, eso sí, previamente hay que untarlos con un poco de mantequilla para evitar que se peguen y poder separarlos con facilidad.
Ponemos a calentar en una sartén el aceite de oliva, cuando la temperatura sea adecuada introducimos la masa hasta que se dore y sean crujientes. Los vamos retirando sobre una bandeja con papel absorbente para retirar el sobrante de grasa. Y dejamos que se enfríen.
El relleno del cannoli
Mientras en un bol mezclamos la ricotta con azúcar y la vainilla rallada, cuando la mezcla sea homogénea y sin grumos la introducimos en los canutillos fríos.
Espolvoreamos con canela y azúcar; y sucumbimos al placer de dar el primer bocado. Bon appetit.
Algunas personas pagarían mucho por esta información; pero entonces, su hija perdería un padre en lugar de ganar un marido